sábado, 22 de enero de 2011

PARANOIA

Si usted anda por mi barrio tal vez encuentre asombrado por el nombre de un minimercado muy típico de de nuestras latitudes.

Consciente de que los nombren dice mucho y nunca son puestos al boleo, llamar Matrix a una despensa (hoy minimercado) tiene seguramente connotaciones que van más allá de nuestra comprensión y hablando en criollo es mucho mejor nombre que FER-LU-FLO o YONI-FER-LUC; nombre típico de las despensas o maxiquioscos que homenajean a los hijos de los dueños tomando las primeras sílabas de sus nombres y mezclándolas de manera que tenga algún tipo de sentido aunque en el 99% de los casos el producto literario final chorree grasa.
Pero volviendo al tema que nos compete, yo creo que en la Matrix pasan cosas. Su propietario (el inefable Kenio) es un tipo por demás parsimonioso a la hora de atender los clientes; al principio no le presté demasiada atención, pero como no soy gil (?), después caí en la cuenta de que en realidad el nos ve como barritas de letras verdes fluo que caen y por eso es que demora un poco en reconocer los clientes y reaccionar de manera más expeditiva.
Pero, ojo al piojo cuando vaya a comprar caramelos.
Un día de invierno me acerco hasta el minimercado en busca de unos Menthoplus. El dueño me miró como extrañado, peló unos anteojitos negros chiquitos, se los colocó sobre su nariz y acto seguido me dijo "puede elegir entre el azul y el rojo".

Ahí me agarró un cagazo padre y terminé llevando un Flynn Paff sabor uva y una bolsita de girasol.

En mi barrio pasan cosas raras.


1 comentario:

Anónimo dijo...

lo mas extraño es el ruido que hace Kenio con la boca.. porque ni si quiera habla.. es un tipo raro.